¿De dónde viene el Mango?
El Mango es el fruto del árbol Mangifera índica, que es de la misma familia botánica que el anacardo y el pistacho. Su origen re remonta a la región de los pies de los Himalayas, en el noroeste de la India, aunque fue extendiéndose por todo el sudeste asiático, donde hace más de 4.000 años que se cultiva.
Algunas de las propiedades del Mango
El Mango es un fruto que destaca por el conjunto de nutrientes y sustancias antioxidantes que se hallan en su composición
- Rico en Vitaminas C y A Una sola pieza de unos 200 g aporta la cantidad diaria recomendada de vitamina C (unos 60 mg) y el 60 % de la vitamina A, en forma de betacaroteno. El mango podremos considerarlo como una de las fuentes más importantes de este nutriente.
- Rica en Vitamina E La vitamina · es uno de los antioxidantes y protectores cardiacos más eficaces, y que normalmente suele encontrarse principalmente en los alimentos grasos, aquí nos encontramos con un fruto que posee una cantidad muy elevada de esa vitamina, para ser una fruta. Una pieza de alrededor de 200 g aporta 2,3 g, es decir un 23 % de la cantidad diaria recomendada.
- Aporta a nuestro organismo magnesio y potasio Destaca su alto valor en minerales como el magnesio y potasio, ya que el mango aporta el 10 % de las necesidades diarias de nuestro organismo.
- Ácidos tartárico y málico, ayudan a contrarrestar el efecto de los residuos metabólicos de naturaleza ácida
Beneficios del Mango
- Nos protege la piel y las mucosas. Por su alto contenido en betacaroteno es muy útil para proteger la piel, las mucosas, los ojos y el corazón frente a la acción de los radicales libres.
- Mantiene huesos y músculos en forma.
- Ayuda a alcalinizar y fluidificar la sangre Los ácidos orgánicos débiles que nos aporta el mango, y una vez que han sido asimilados por nuestro organismo, gracias a su combinación con los minerales, dan lugar a sales que tienen la capacidad de fluidificar y alcalinizar la sangre.
- Favorece la asimilación de nutrientes Posee enzimas que propician la asimilación de los macronutrientes
- Nos ayuda a estimular las defensas
Las variedades del Mango que podemos encontrar son muchos
En el mundo podemos encontrar más de 40 especies de mango y una cantidad de variedades que puede llegar al millar. Pero las multinacionales de la alimentación han privilegiado unas pocas, las más resistentes a las plagas y apreciadas por el gusto de los occidentales.
En España, la temporada del mango va desde agosto hasta noviembre. Las variedades de mango más importantes –la mayoría se cultiva Málaga, Granada e Islas Canarias– son las siguientes:
- Mango Osteen: en su punto adecuado de maduración, el mango Osteen es de un llamativo color rojo-anaranjado, con toques carmesí en la parte superior y verdes en la base. Su pulpa es ligera, de moderada firmeza, suave, dulce y exenta de fibras. Su peso suele oscilar entre 500 y 600 g por pieza.
- Mulgoba: fruto de tamaño mediano (9-12 cm de longitud y 7-9 cm de anchura), de color amarillo fuerte, a veces rojo en el ápice y junto al pedúnculo, con lunares superficiales de pequeño tamaño. La cáscara es gruesa y la carne es suave, sin fibras, de aroma y sabor agradables, un poco picante.
- Amini: de pequeño tamaño (7-9 cm de largo y 7-8 cm de ancho), es de color verde amarillento, escarlata en la base y con lunares de color amarillo pálido. La pulpa es de excelente calidad, sin fibras, de color rojizo, pálido y muy jugosa. Pairi: se diferencia de la variedad “amini” en que la cáscara es más fina y en que la pulpa desprende un perfume pronunciado.
- Camboyana: de tamaño regular (10-12 cm de largo y 6-7 cm de ancho) y forma alargada, es de color verde amarillo, tiene la cáscara blanda y delgada, y la pulpa es muy jugosa, aromática y ligeramente ácida.
- Sansersha: de gran tamaño (entre 500 g y un kg, de 17-22 cm de longitud y de 9-11 cm de anchura) es de color amarillo algo rojizo, con numerosos lunares pequeños de color amarillo grisáceo. Su pulpa es carnosa, sin fibras y algo ácida. Es fantástico para hacer conservas.
Algunas formas de comer un mango
Podemos hacer láminas:
1. Corta los extremos de la fruta.
2. Ponlo vertical y pela la piel de arriba abajo siguiendo la curvatura de la fruta.
3. Corta en láminas hasta llegar al hueso por cada lado.
Utiliza una cuchara:
1. Corta dos grandes rodajas a cada lado del hueso.
2. Sepáralas dejando el centro ocupado por el hueso.
3. Utiliza una cuchara para sacar la pulpa.
Corta en cubos:
1. Corta un “filete” a lo largo.
2. Con un cuchillo bien afilado haz una cuadrícula de cortes perpendiculares sin atravesar la piel.
3. Dale la vuelta al mango y los cubitos de pulpa se separarán. Córtalos por la base.
Utiliza un tenedor
1. Haz un corte en forma de cruz en un extremo del mango.
2. Retira la piel en cuatro partes.
3. Ensarta el mango en un tenedor.
Cómo podemos elegir un Mango
Los mangos suelen cosecharse verdes para que no se pudran antes de llegar a su destino final, quizá a miles de kilómetros. Además, suelen tratarse con muchos plaguicidas, como el “carbide”. Por eso es recomendable, si es posible, optar por mangos de cultivo ecológico.
Si el mango está aún verde puede madurar lentamente en la nevera a 12 grados durante una o dos semanas. También se puede mantener a temperatura ambiente durante unos días o meterlo dentro de una bolsa de papel para acelerar la maduración.
El mango maduro se caracteriza por su aroma agradable y porque al presionar un poco no está completamente firme ni blando. Una manera de saber el estado de maduración es dejar la fruta en agua: si se hunde está madura y si no está verde.
El color no es un indicador general, pues depende de la variedad: algunas continúan verdes cuando están maduras, mientras que otras son amarillas, naranjas o azuladas.
En Entrena con Ainhoa somos conscientes de que la alimentación es fundamental de cara a una buena calidad de vida y a que nuestro organismo responda en todas las situaciones de nuestro día a día. Te invitamos a conocer nuestras Dietas para Adelgazar
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